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La experiencia de la Reserva Natural Mari Mari tiene una combinación de acomodaciones de lujo, buena comida, servicio impecable, actividades que te cambian la vida en una región poco conocida de la costa de la Patagonia chilena. La experiencia está construida con los principios y vestigios de la cultura perdida de Monte Verde. El descubrimiento de la huella de un niño pequeño en 1975 en un campo pantanoso cerca de la ciudad de Puerto Montt removió el mundo arqueológico; era la evidencia de asentamientos humanos en América previos al aceptado paradigma de Clovis por aproximadamente 1.000 años. La cultura de Monte Verde vivía en armonía con la flora y la fauna en lugar de dominarla y destruirla. Su impacto fue mínimo, sin construcción de templos o pirámides, dejando una huella muy, dejando una huella tan pequeña como sea humanamente posible. Su legado permanece en todo lo que hacemos en Mari Mari. Establece un punto de referencia de respeto y responsabilidad. Nos inspira a hacernos parte de nuestro entorno, viviendo en armonía con la vida silvestre y vegetación que se encuentra en este mágico lugar. “Mari Mari” es un término en Mapudungun que no sólo da la bienvenida a visitantes en sus hogares sino que los invita a ser parte de la familia y la comunidad. Nosotros te extendemos la misma invitación.